Ya sea por diversión, ciberterrorismo o para conseguir dinero. Con el paso del tiempo, los ciberdelincuentes han descubierto nuevas y más sofisticadas formas de atacar por medio de redes corporativas. Debido a la transformación digital y el aumento en trabajo remoto, la ciberdelincuencia ha aumentado a tal punto que podríamos encontrarnos en una especie de “pandemia de las ciberamenazas”.
Los ciberataques a empresas crecen un 25% a causa de la pandemia y son ataques cada vez más profesionalizados desde distintas partes del mundo.
(La Vanguardia, 2021)
Por su parte, las organizaciones tienen el desafío de comprender el panorama actual y evaluar sus medidas y políticas de seguridad, sobre todo en lo que respecta a las amenazas que circulan en el tráfico de la red.
Todos los años, es posible ver noticias sobre masivos ciberataques que causan millonarias pérdidas a grandes empresas, bancos o incluso instituciones del gobierno. Estos son solo la mitad de lo que las instituciones están dispuestas a reconocer por miedo a perder reputación.
Un reporte del FBI demostró que las pérdidas económicas por ciberataques en 2020 han superado los 4.000 millones de dólares.
(Internet Crime Report, 2020)
Actualmente, las estadísticas muestran un considerable aumento en los ciberataques en empresas a nivel mundial. Conforme a estas estadísticas, este fenómeno podría ser considerado una verdadera “pandemia de ciberamenazas”.
62,7% de las empresas creen que los ciberataques han aumentado desde el año 2020 debido a la pandemia de COVID-19.
(Preyproject, 2021)
Algo que es importante destacar, es que todas las empresas que han sufrido vulneración de seguridad han declarado utilizar los sistemas tradicionales de protección, es decir, firewall, antivirus convencionales o incluso las famosas y no tan efectivas redes privadas virtuales o VPN.
Más del 77% de los afectados por ransomware estaban ejecutando una protección de endpoints actualizada, confirmando que la seguridad de endpoints tradicional ya no es suficiente para protegerse contra los ataques de ransomware actuales.
(Sophos, 2018)
Así como los cibercriminales han aumentado y profesionalizado sus métodos con ataques “next gen”, las empresas tienen el desafío de implementar sistemas de prevención y control de acceso a la red que estén a la altura de las nuevas exigencias.
Los llamados ataques de nueva generación o “next gen” dirigidos activamente a la seguridad de código abierto, aumentaron 430% durante el año 2020.
(Sonatype, 2020)
Con el teletrabajo, las organizaciones migran su almacenamiento de información a sistemas virtuales o “en la nube”. Esto quiere decir que el perímetro físico de conexión ya no existe, sino que ahora el perímetro estará donde se encuentre el usuario. Por tanto, el desafío de seguridad estará enfocado en desarrollar tecnologías que brinden mayor protección a la red, los sistemas virtuales, los accesos de usuario y los dispositivos de conexión o ENDPOINT.
Ese alto nivel de preocupación sobre la capacidad de resistir ciberamenazas... está provocando que el 91% de las organizaciones aumenten sus presupuestos de ciberseguridad en 2021.
(Insight Cybersecurity, 2021)
Actualmente existen innovaciones tecnológicas que brindan multicapas de seguridad robustas, protegiendo tanto la red interna como las redes externas, los dispositivos y el acceso de los usuarios. Así, hoy es posible encontrar herramientas de protección de redes como SD-WAN y sistemas de control de acceso remoto seguro SDP Software Defined.
Una SD-WAN por sus siglas en inglés Software-defined Wide Area Network o red de área amplia definida por software, es lo último en seguridad y optimización de redes. Es una arquitectura de WAN virtual que permite aprovechar cualquier proveedor de servicios de conexión a Internet para conectar de forma segura y eficiente a los usuarios y aplicaciones. Esta tecnología se basa en software y hardware para sustentar su funcionamiento, lo que le otorga mayor rendimiento, eficiencia, seguridad, control y dinamismo en sus conexiones.
Un sistema de Acceso Remoto Seguro, reúne una serie de soluciones de seguridad multicapa para organizaciones que buscan fortalecer las medidas de forma integral. De esta forma, se protegen las redes, los puntos de acceso y, principalmente, el “eslabón más débil de la cadena”, el usuario mismo.
¿Qué pasaría si un día te das cuenta que la información confidencial de tu organización ha sido filtrada o secuestrada por un hacker que te obliga a pagar un rescate?
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